La medida fue comunicada por la Secretaría de Energía con el objetivo de sostener la desaceleración inflacionaria y aliviar el bolsillo de los consumidores.
El Gobierno nacional decidió no aplicar en mayo de 2025 la actualización correspondiente a los impuestos a los combustibles líquidos (ICL) y al dióxido de carbono (IDC), tal como establece la Ley 23.966. La medida fue confirmada por la Secretaría de Energía de la Nación a través de un comunicado oficial emitido este martes 29 de abril.
“La decisión del Gobierno Nacional es no aplicar la actualización correspondiente al mes de mayo de los impuestos a los combustibles. De esta manera, se busca sostener la desaceleración de la inflación, cuidar el bolsillo de los argentinos y apuntalar el crecimiento de la economía”, señaló el organismo energético en su cuenta oficial de X (ex Twitter).
Esta medida fiscal busca evitar un aumento directo en los precios de los combustibles, ya que la aplicación de estos impuestos, actualizados por inflación de forma trimestral, hubiera tenido un impacto inmediato en los surtidores. En decisiones anteriores, el Poder Ejecutivo ya había optado por escalonar o postergar la aplicación de estos tributos, en un intento por evitar que el componente impositivo dispare los valores al público.
La suspensión de la suba impositiva llega en un contexto en el que el Gobierno busca consolidar una tendencia a la baja en la inflación general y reforzar señales de estabilidad económica. La medida se da en paralelo a otras decisiones en materia tarifaria para el mes de mayo, como aumentos moderados en servicios públicos y congelamiento de boletos en el transporte metropolitano.
La Secretaría de Energía no precisó aún si esta política fiscal se mantendrá durante los meses siguientes, aunque dejó en claro que el objetivo es acompañar el proceso de recuperación económica sin trasladar mayores cargas al consumidor.