El CEO de Phoenix Global Resources, Pablo Bizzotto, aseguró que el sur de Vaca Muerta podría superar en rendimiento al norte de la formación. La compañía ya invirtió 760 millones de dólares en la zona, donde opera en las áreas Mata Mora y Confluencia. Con resultados alentadores y fuerte apuesta a la tecnología, proyecta alcanzar una producción de hasta 70.000 barriles diarios antes de 2030.
Durante su participación en el foro Vaca Muerta Insights 2025, el CEO de Phoenix Global Resources, Pablo Bizzotto, compartió una mirada optimista sobre el potencial del sur de Vaca Muerta y destacó el papel que la compañía desempeña en la ampliación de los límites productivos de la formación.
Según Bizzotto, los avances tecnológicos y el conocimiento acumulado en los últimos años han permitido explorar zonas que antes eran consideradas marginales. “Hoy estamos extrayendo crudo de 23 grados API con resultados excelentes, algo impensado hace una década”, afirmó. En ese entonces, se creía que la densidad mínima para operar eficientemente era de 35 grados API.
Este cambio en el umbral técnico abre la posibilidad de incorporar hasta 2.000 km² adicionales a la ventana de black oil, que actualmente abarca cerca de 20.000 km². El foco está puesto en el sur de la formación, donde Phoenix desarrolla dos áreas clave: Mata Mora y Confluencia.

Resultados sólidos y visión de largo plazo
Phoenix obtuvo la concesión no convencional de Mata Mora en 2021 y desde entonces invirtió 760 millones de dólares en el desarrollo de pozos diseñados para ser rentables desde el primer día. En paralelo, en Confluencia, los primeros pozos perforados ya muestran resultados alentadores: una producción de 4.500 barriles diarios y 600 mil barriles acumulados en cinco meses.
“Mata Mora está completamente desriskeada y eso nos da margen para proyectar con solidez. Confluencia podría incluso superar ese desempeño”, señaló Bizzotto. La empresa ya perforó 34 pozos horizontales y proyecta un total de 500 en un área de 500 km², con una producción actual de 20.000 barriles diarios.
En los próximos días, iniciarán un piloto con tres pozos en Confluencia Sur para evaluar su potencial. Los resultados serán claves para decidir cuál de las dos áreas priorizar en el plan de desarrollo.
Tecnología, eficiencia y expansión
Phoenix está incorporando un segundo equipo de perforación y construyendo una nueva planta de tratamiento en Mata Mora, ya adjudicada. Además, apuesta por la inteligencia artificial para optimizar decisiones operativas y reducir errores.
“Muchas empresas de perforación ya trabajan con IA. Nosotros también estamos avanzando en esa línea”, afirmó Bizzotto.
El objetivo de la compañía es ambicioso: alcanzar un plateau de producción de entre 50.000 y 70.000 barriles diarios antes de 2030.
Un 2025 decisivo
Bizzotto consideró que 2025 será un año clave para Phoenix, con fuertes inversiones en infraestructura y tecnología. En un escenario de precios moderados, entre 55 y 60 dólares por barril, según proyecta, el control de costos será determinante:
“La planificación y la eficiencia en conjunto con las empresas de servicios será lo que marque la diferencia”, concluyó.
Con una visión de largo plazo y un enfoque claro en innovación y eficiencia, Phoenix Global Resources apuesta a consolidar su protagonismo en el sur de Vaca Muerta, un área que, según su CEO, podría convertirse en la nueva estrella del desarrollo energético argentino.