En el tercer trimestre del año alcanzó 17,6 MMm³/d de gas y exportó a Chile en invierno; su proyecto de shale oil en Neuquén ya produce 16.000 bpd y apunta a 20.000 bpd hacia fin de año.
Pampa Energía comunicó que llegó a 17,6 millones de m³ diarios de gas, su máximo histórico. Ese volumen le permitió cumplir la demanda local y exportar a Chile durante el invierno, con un promedio de 1,2 MMm³/d.
En petróleo, el desarrollo Rincón de Aranda (en Vaca Muerta) produce 16.000 barriles por día con seis pads en operación y proyección de 20.000 bpd para fin de 2025. La compañía indicó que este proyecto es su inversión más grande, con US$700 millones presupuestados en 2025 y cerca de US$540 millones ya ejecutados al cierre del trimestre.
En generación eléctrica, la desregulación habilitó que Pampa autoabastezca con gas propio su Central Loma de la Lata por primera vez en seis años, mejorando costos y eficiencia. La disponibilidad de sus centrales se ubicó en 94%, con apalancamiento bajo (deuda neta/EBITDA de 1,1x) tras reducir la deuda neta de US$874 millones a US$790 millones después del cierre. Para el management, fue un trimestre de ejecución de capital y fortalecimiento financiero, que consolida la estrategia no convencional y le da respaldo para sostener el ritmo de inversión.
Para la Norpatagonia, el resultado se traduce en más gas disponible, una base petrolera en expansión y mayor integración gas-electricidad. Con estos niveles de producción y un marco regulatorio previsible, Pampa Energía queda mejor posicionada para aportar moléculas a la exportación estacional y escalar crudo en Neuquén, con impacto directo en empleo y cadena de proveedores de la región.




