El uranio vuelve a ocupar un lugar central en la agenda energética nacional en dónde Río Negro y Santa Cruz se posicionan como protagonistas clave en esta nueva etapa que impulsa el desarrollo de la energía nuclear en el país.
Desde hace meses, Río Negro viene consolidando su perfil como territorio con alto potencial para la minería de uranio. Proyectos como “Ivana”, ubicado al sur de la provincia y operado por Blue Sky Uranium Corp., han despertado el interés de grandes inversores. Recordemos que en diciembre de 2024, Corporación América, el holding liderado por Eduardo Eurnekian, anunció una inversión de 160 millones de dólares para avanzar en la exploración y desarrollo del yacimiento. La iniciativa busca no solo abastecer la demanda local de uranio, sino también exportar a mercados internacionales.

En paralelo, Santa Cruz también ha comenzado a ganar protagonismo en esta agenda. Representantes de ambas provincias participaron recientemente de rondas de negocios e intercambios con empresas e inversores en Canadá, uno de los países con mayor experiencia en el desarrollo del ciclo del combustible nuclear.

Energía nuclear en el centro de la escena

La reactivación del Plan Nuclear Argentino, acompañada por la decisión del gobierno nacional de apostar por la energía nuclear como soporte energético para el desarrollo de inteligencia artificial y tecnologías de alto consumo eléctrico, volvió a poner al uranio en el centro de la conversación energética.
En este contexto, Río Negro y Santa Cruz aparecen como “mecas del uranio”, según medios especializados como Más Energía. Ambas provincias no solo poseen condiciones geológicas favorables, sino que también cuentan con infraestructura básica y marcos normativos que permiten avanzar en esta clase de proyectos.
Río Negro: un camino que se viene trazando hace tiempo
No es casual que Río Negro esté hoy entre las principales candidatas para liderar el renacer del uranio en la Argentina. Desde hace años, y con mayor impulso en los últimos meses, la provincia ha buscado atraer inversiones mineras con focos en minerales estratégicos. El uranio, como insumo clave para la generación de energía nuclear, es uno de los puntos más sensibles de esta estrategia.
Sin embargo, el debate no está exento de tensiones. La minería de uranio genera resistencias en algunos sectores sociales y políticos, lo que obligará a las empresas y al Estado a reforzar el diálogo, garantizar estándares ambientales y construir consensos para avanzar con responsabilidad.
Con el foco puesto en la transición energética y la búsqueda de autonomía energética, Argentina comienza a mirar al sur para fortalecer su apuesta por la energía nuclear. Río Negro y Santa Cruz tienen lo que el mundo busca: recursos estratégicos, potencial geológico y voluntad política.